Con una historia, a priori sencilla, de 2 minutos se tratan infinidad de valores como la perseverancia, la diversión, el aprendizaje o la generosidad.
También tiene cabida el cómo gestionamos un reto los adultos y cómo lo hacen los/as niños/as. Pongamos atención a su gestión de la prueba-error o a su gestión de la frustración.